MARÍA LAMARCHE RECONOCIÓ QUE LA DISCUSIÓN FUE “ACALORADA”

La Presidenta del bloque de concejales del Frente de Todos María Lamarche explicó los alcances del cruce que protagonizó con la titular de la bancada oficialista Lucrecia Herrería en la sesión del Concejo del pasado martes.
Fue cuando Lamarche puso en tela de juicio la aplicación igualitaria de las leyes y ordenanzas, y tomando como ejemplo la reunión social clandestina del pasado viernes.
Herrería la acusó de fomentar la grieta o las divisiones por plantear una apreciación diferente a la que el Intendente Municipal había explicitado el lunes en la conferencia de prensa.
Lamarche aclaró que el cruce no fue violento, aunque reconoció que la discusión “acalorada” porque se reconoció “vehemente” a la hora de defender derechos.
“Me sentí afectada cuando se afirma que soy la generadora de la grieta o la división en la sociedad a partir de disentir con alguna expresión o concepto que manifiesta el Intendente” dijo Lamarche, quien expresó con ejemplos concretos cuáles son sus objeciones, “lo que nosotros planteamos en el bloque es lo que la mayoría de la gente manifiesta en relación a que si bien la ley se establece para la generalidad lo que ocurre en la práctica es que se genera una disparidad según a quien le caiga esa sanción”.
La Concejal sostuvo que el intercambio “no fue ni con insultos ni con agravios”.
Lamarche, lejos de sentirse promotora de las divisiones, explicó que desde el bloque fueron prudentes a la hora de expresar la posición ante el evento social clandestino y sus consecuencias, que fueron visibles en la repercusión que el hecho tuvo en la sociedad.
“La ciudadanía se expresó de una forma casi cruel en algunos aspectos y desde la oposición fuimos muy prudentes y respetuosos”.