El Centro de Salud Mental cumple 14 años de compromiso con la comunidad.

En el año 2011, bajo la iniciativa del Dr. Barili, se inauguró en nuestra localidad el Centro de Salud Mental, un espacio que en sus comienzos generaba dudas sobre su rol, sus actividades y su alcance, pero que con el paso del tiempo se consolidó como un servicio fundamental para vecinos y familias.
Hoy, a 14 años de su apertura, el Centro continúa funcionando y brindando acompañamiento a quienes más lo necesitan. Actualmente asisten 19 concurrentes, de los cuales algunos participan diariamente y otros lo hacen de manera semanal para retirar su medicación, compartir actividades y mantener el vínculo con el equipo.

La coordinadora del Centro, Cecilia Dimartino, destacó que el espacio “es un lugar necesario, que presta un servicio satisfactorio a la comunidad” y que, además de las terapias y controles médicos, busca fortalecer la independencia y hábitos de convivencia de los usuarios a través de tareas cotidianas: poner la mesa, colaborar en la cocina, ordenar los talleres o mantener la limpieza del lugar.
A estas actividades se suman talleres de música, expresión corporal, educación física y encuentros al aire libre, además de la construcción de una huerta comunitaria, que fomenta el contacto con la naturaleza y el trabajo en equipo. “Siempre tratamos de sostener las rutinas porque es fundamental para ellos mantener la independencia”, explicó Dimartino.
El Centro también articula con otras instituciones y asociaciones de la ciudad, generando proyectos compartidos que fortalecen la integración social de los concurrentes. La relación con las familias es otro pilar: a través de la entrega semanal de pastilleros y un contacto permanente, se busca acompañar de manera integral cada situación.
Respecto al sostenimiento del espacio, Dimartino subrayó que dependen del Hospital local y cuentan con presupuesto propio para el funcionamiento diario. Sin embargo, uno de los principales desafíos sigue siendo la accesibilidad a la medicación, ya que en ocasiones surgen dificultades burocráticas o económicas que deben resolverse junto a la farmacia del Hospital.
Más allá de los obstáculos, Cecilia resalta los momentos gratificantes que hacen valer el esfuerzo diario: la inauguración de nuevas actividades, la participación en eventos culturales y, sobre todo, el acompañamiento constante de la comunidad. “Te das cuenta de que el Centro significó y significa algo muy importante. Nos sentimos acompañados y eso es lo que queda para siempre”.
El Centro de Salud Mental cumple 14 años de trabajo sostenido, demostrando que con compromiso, políticas públicas firmes y un equipo dedicado es posible garantizar inclusión, contención y calidad de vida a quienes más lo necesitan.